Mariana, inextinguible, en la altura de Cuba
Madre Patria, palma erguida, orgullo de Cuba, tan virtuoso tronco cargado de leyendas, de amores y desvelos en la manigua mambisa, que vuelve floreciendo Marianas de luminosas hazañas en azarosos tiempos, a la par del hombre que la contempla y admira con el corazón a galope.