Estar por debajo de los pronósticos hasta el momento no ha sido devastador para los Toros de Camagüey en lo que va de temporada.
El desempeño en los primeros cinco compromisos particulares le tienen con un promedio positivo en cuanto a victorias y derrotas y en zona de clasificación en gran parte del calendario.
El enfrentamiento ante su más cercano perseguidor, Mayabeque, dejó un agridulce sabor de boca, tras caer tres juegos por dos por asuntos más allá de lo que muestran los peloteros en el terreno.
El arranque entre estos supuso un verdadero anuncio de poder por parte de los batedores de la alineación local, que no pararon hasta vencer por las reglas de la misericordia en siete entradas a los visitantes. El capitán Leonel Moas Jr. solo falló en una de las cinco visitas al cajón de bateo; como extrabase hizo un triplete y corriendo pisó el plato en cuatro oportunidades, suficiente para ser el jugador más determinante. También le fue bien a Yordanis Samón, Alexander Ayala, Reinaldo Almanza y Luis González Azcuy, los que le siguen en el listado al jardinero central.
Sería también la despedida del cabecilla de la rotación de lanzadores, José Ramón Rodríguez, quien antes de irse a Venezuela dejó tres salidas de calidad en cuatro oportunidades.
El miércoles los visitantes tomaron desquite tras una remontada. Lograron en el sexto capítulo descifrarle los lanzamientos al novato mundialista juvenil Edenis Cruz, quien en su primera salida en series nacionales los silenció durante cinco.
Aunque un enfrentamiento particular consta de cinco partidos y prácticamente se define que el fin de semana, el que sostuvieron Camagüey y Mayabeque quedó a favor de los segundos, tras una controversial confiscación. En el terreno ganaron los agramontinos en peleado pleito, pero la utilización del relevista Juan Raúl Lugo reventó la soga. Los de rojo vino reclamaron una violación del reglamento de lanzamientos y la misma procedió, dejando como resultado el segundo hecho de este tipo (descalificación del ganador de un partido por ilegalidad) en la presente temporada.
En el anterior también salieron beneficiados los mayabequenses. Quizás en el olvido quede la temporada de los “confiscadores” de Mayabeque, pues el epíteto seguramente nunca lo recibirán. La consecuencia también vino como sanciones de más de un partido al mentor Vicyohandri Odelín y al entrenador de lanzadores Edilberto Serrano.
¿Habrá fallado una información desde La Habana y la consecuencia la pagaron los directivos de la novena?
Llegaría el fin de semana y casi la perfección al montículo por parte del lanzador zurdo Dariel Góngora. Realizó su primera blanqueada del campeonato en un partido de nueve entradas y dejó a los rivales en solo tres imparables.
El domingo se viró la tortilla y los visitantes concretaron su victoria en el compromiso particular . El lanzador Yadián Martínez tomó revancha de lo sucedido en el juego inicial, donde salió temprano del montículo tras una feroz ofensiva por parte de la ofensiva camagüeyana; de marcharse con seis carreras limpias en su casillero el martes dejó ceros el domingo.
A la Isla de la Juventud se fue la novena de los Toros con varias ausencias, tanto en el cuerpo de lanzadores como en la batería.
Sobre el terreno, el martes no habría consecuencias tras una barbarie de batazos que dejó el marcador final asegurado en siete entradas.
Todos los de la parte arriba de la alineación, pegaron un imparable al menos. El más destacado fue Rafael Álvarez con una jornada de 5-4, mientras que Leonel Moas y Yordanis Samón, además de pegar más de un indiscutible, llevaron la pelota por encima de las cercas de los jardines. Otro que se puso el medallón de home run hitter fue Yosbel Pérez.
Un primer tercio para el olvido, definió la igualdad en la serie particular en la jornada de miércoles con una sorpresiva victoria para los Piratas. El cuerpo de lanzadores recibió un castigo de siete carreras limpias de las nueve en total.
La venganza se apoderó de los camagüeyanos y el jueves jugaron solamente cinco entradas para dejar mal parados a los locales.
Segunda victoria de los Toros de Camagüey sobre La Isla por diferencia superior a diez. Está vez 16 x 0 (cinco entradas) #Cuba pic.twitter.com/mfh4bxE2l8
— Roberto Carlos Serrano (@rcserrano97) October 2, 2025
El lanzador abridor Yasel Labrada dejó a los pineros en tres imparables y tuvo un respaldo ofensivo donde destacó Leonel Moas, Rafael Álvarez y Samón, con más de un imparable y un doblete como extrabase cada uno.
La gran forma de los bateadores le llegó otra blanqueada el sábado por parte de los lanzadores Yordanis García y Lázaro Guerrero. Perdían los Toros, un juego de esos que al final de la temporada regular empieza a recordarse cuando la tabla está compacta.
Por suerte, la intuición de sorpresa quedó atrás y con un Rodolfo Sorís con salida de calidad el domingo, más otros mediodías de lujo para Álvarez, Moas y González Azcuy se definía el compromiso particular a favor de la novena que dirige Vicyohandri Odelín, tres victorias por dos.
Es un análisis de estas dos últimas semanas la polémica la desata la batería por encima de lo que hacen los lanzadores. La inestabilidad en este asunto provocó los resultados que dejan preocupación; lo mismo en un juego son capaces de fabricar más de 10 carreras y al siguiente día de recibir lechada. A eso sumar que por colectivos Camagüey es el que más batea con promedio de .348. Lo de los serpentineros es lo que se esperaba previo al inicio de la temporada. La defensa está por encima de la media y hasta el momento no va siendo protagonista.
En los diferentes departamentos no sobresale ningún camagüeyano como líder. Sin embargo, en la boleta de jugador más valioso de la semana aparecen entre los candidatos dos jugadores.
La siguiente parada será el estadio Guillermón Moncada. El rival, un equipo que tiene en su alineación a Yoelquis Gibert, el máximo jonronero, y a Yoel Yanqui, el líder remolcador. El martes se despejarán las dudas del paradero de Alexander Ayala y otros que no viajaron a la Isla de la Juventud. El pronóstico de cómo quedará el enfrentamiento pudiera ser un cuatro a uno a favor de los santiagueros.