Camagüey- Parecía un partido parejo desde el principio debido a la permanencia de jugadores de Las Tunas de un año a otro, muchos de ellos de buen desenvolvimiento en el fútsal; y un elenco de Camagüey con varias caras nuevas a este nivel, todo después de dos años de inactividad del Torneo Apertura de la Liga de Fútbol de Cuba.
La pitada del árbitro fue el comienzo de un mar de ataque y búsqueda del gol por parte de los que juegan como locales en la cancha Amador Fernández. Solo en media hora Keyler James González, su capitán y principal atacante, tuvo dos ocasiones claras de meter el balón en la meta rival. Desde el punto de vista del partido físico, ambos conjuntos jugaron fuerte, al punto de que los cambios comenzaron temprano debido a lesiones.
La inseguridad temía a los visitantes, pérdidas de balón en sitios peligrosos en defensa no tuvieron males mayores debido al perdón de la delantera anfitriona, la falta de claridad en ataque hizo a los del balcón del Oriente llevar la esférica más al banderín de tiro de esquina, que a la meta donde debían anotar, aún así, la primera mitad se fue sin goles.
Camagüey en los 45 minutos restantes comenzó por debajo del rival que lució mejor en cuanto a la posesión del balón y creó mayores ocasiones de gol, sin embargo, con los cambios y el avance del cronómetro volvieron las aguas a su lugar inicial.
Poco faltó para vencer el minuto noventa y el acoso a la portería tunera crecía. El propio James lanzó un balón con suavidad al larguero, pero no entró. Sería sobre el minuto noventa una acción que terminaría en penalti a favor de los Miuras lo que pondría el 1-0 como cifra definitiva al partido del arranque. Gol para Keyler, el capitán y el motivo de celebración para los asistentes como hinchada.
A la oncena que dirige el técnico Roberto Villegas Collazo le espera el próximo sábado la de Sancti Spíritus en su terreno en el centro de Cuba, con el deseo del desquite de la última derrota en la edición anterior.
Foto: Adelante