Las cifras son escalofriantes: los casos de muertes por la Covid 19 alcanzan más de medio millón en todo el mundo, y es Estados Unidos, el país más rico del planeta, que más pavonea sus supuestos logros y virtudes, uno de los más afectados por la pandemia, con el sistema de salud colapsado y déficits de equipamiento, camas y medicinas.
Incomprensible, ¿verdad? El problema es que en vez de destinar fondos suficientes a los programas de salud pública, el gobierno de míster Trump invierte cifras sin precedentes en gastos militares.
Nadie lo duda: el gendarme mundial es la potencia más fuerte militarmente, aunque muestre limitaciones en esferas claves para la supervivencia humana.
¿Qué importa que haya millones de estadounidenses sin trabajo, sin seguro médico, sin techo y sin comida, siendo muchos de ellos ex combatientes en alguna de las irracionales guerras libradas al amparo de la bandera de las barras y las estrellas?
A ningún millonario, a ningún Pompeo, a ningún Marco Rubio le preocupa tan lamentable realidad: lo importante es consolidar cada vez más el poderío de las armas y el supremacismo de los hombres de la Casa Blanca y el Pentágono.
Durante el gobierno de Trump, los E.U. han gastado más de 2,5 BILLONES de dólares en el reforzamiento de las fuerzas armadas, considerado la mayor potencia de combate a escala mundial.
¿Qué habría sucedido si una pequeña parte de ese dinero se hubiera destinado no solo a mejorar el sistema de salud entre fronteras, sino simplemente a hacer el bien en los países más necesitados?
La Organización Mundial de la Salud (OMS) registró este domingo 183 mil 20 nuevos casos, siendo este el peor día desde que inició la pandemia. Esta cifra supera el récord anterior de 181 mil 232 infecciones contabilizadas el 18 de junio, de acuerdo al reporte diario sobre la situación de la COVID-19 emitido por la institución.
Los países más afectados durante la última jornada fueron Brasil, con 54 mil 771 nuevos contagios y Estados Unidos, que registró 36 mil 617. Mientras, el nuevo coronavirus continúa propagándose por América Latina y se incrementa el rebrote en China.
Sobran las palabras.
