Antiespañolismo en el teatro principeño: La ofensiva del Casino Español.

En 1868 las medidas dictadas por España para contrarrestar la insurrección irrumpen en la vida intelectual y teatral de Puerto Príncipe. A finales de ese año el teatro Principal fue ocupado por el Cuerpo de Voluntarios, y los interventores españoles cierran sus puertas al público.

Salvador Cisneros Betancourt, uno de los accionistas, dice en uno de sus apuntes que consta en el Archivo Nacional de Cuba: “Durante la guerra fue ocupado el teatro por los voluntarios que a mano armada se posesionaron de él sin siquiera pedir sus llaves ni verse con el conserje, para que recogiera y cuidase de los efectos que allí había y los que constan todos en los apuntes que conservo”
El gobernador, Julián Mena, destinó el Principal a cuartel del Batallón de Cazadores Voluntarios, y con esa medida la actividad teatral quedó trunca. Cuando en 1872 desalojan el local, lo entregan a “algunos de sus socios, quienes lo alquilaban y hacían dividendos”, según Cisneros Betancourt. Al reanudarse las representaciones, solamente se ponían en escena obras patrocinadas por la sociedad Casino Español. Las funciones se organizaban a beneficio de los heridos del Ejército Español o de los apátridas que regresaban del campo insurrecto. El Principal devino un importante vocero propagandístico de las fuerzas peninsulares.
La Sociedad Popular de Santa Cecilia, fundada el 20 de noviembre de 1864, con sede en esos años en el teatro El Fénix y destacada por su sección de declamación, no fue ajena a las medidas tomadas por el gobierno. En junta directiva celebrada el 23 de septiembre de 1868 el gobernador Mena previene “que no se diesen lectura en la sociedad a composiciones en verso o prosa ni se representase piezas dramáticas sin que antes fuesen previamente censuradas por el gobierno”.
De hecho quedan suprimidas las representaciones, las tradicionales funciones mensuales no se ejecutan y se niega permiso a la directiva para reunirse. El 26 de diciembre, el jefe de la Policía Manuel Andújar se persona en el local y comunica a los conserjes el cierre inmediato del edificio. El 7 de abril de 1870 se concede permiso a la junta directiva para reunirse en la residencia de uno de sus miembros. El 18 de octubre disuelven la Sociedad Popular y el Casino Español se apropia de sus salones. El teatro El Fénix quedó transformado en el Teatro del Casino Español, nombre que se embadurnó al frente del edificio.
En cuanto a la Sociedad Filarmónica, fundada en 1842 y en cuyo escenario se presentaban los más diversos géneros teatrales interpretados por aficionados se convirtió en la sede del Casino Español. Esta agrupación de peninsulares fue la fuerza de choque y al mismo tiempo la ejecutora de las directrices del gobierno español en el ámbito cultural y artístico en Puerto Príncipe. Pero no hay que olvidar que de aquellos salones habían salido para la manigua los principales insurrectos. (Continuará)