Continua proceso en la investigación del desastre aéreo y la identificación de las víctimas

 

La máxima dirección del Gobierno hará un exhaustivo seguimiento a la investigación del accidente aéreo y actuaremos para tratar de acortar los plazos. A nuestra población y a los familiares que tengan confianza, pues hay profesionalidad y están creadas todas las condiciones para atender esta situación como merece, manifestó en diálogo con la prensa el Primer Vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Salvador Valdés Mesa, al concluir la segunda reunión de Gobierno para dar seguimiento al hecho.

Luego de ratificar las más sentidas condolencias del Gobierno y del Estado a los familiares de las víctimas, Valdés Mesa aseguró que en un suceso de este tipo el tema referido a la identificación de los restos de los pasajeros necesita un tiempo prudencial de más o menos entre 21 y 30 días, pero nuestro personal de Medicina Legal trabaja para tener detalles en el menor tiempo posible.

«Quiero aprovechar también la oportunidad para agradecer, porque hemos recibido muchos mensajes de solidaridad de presidentes y autoridades de Gobierno, así como de personalidades solidarizándose», resaltó.

Valdés Mesa reiteró el trabajo y el papel que tiene en el proceso de investigación la comisión estatal creada, pero aclaró que igual que en la identificación de los restos, se requerirá de tiempo.

La reunión de Gobierno tuvo lugar en horas de la mañana de este sábado y fue encabezada por Miguel Díaz-Canel Bermúdez, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, y también asistieron José Ramón Machado Ventura, segundo secretario del Comité Central del Partido, y las máximas autoridades de los ministerios y organismos con responsabilidades en los hechos, su investigación y seguimiento permanente.

Al informar a la prensa de los resultados del encuentro, tanto el Primer Vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros como Adel Yzquierdo Rodríguez, titular de Transporte, reconocieron la integración, rapidez, eficacia, disciplina y sensibilidad humana mostrados por los organismos, los vecinos del lugar y la población en general, ante el lamentable suceso, ocurrido el viernes último.

Yzquierdo Rodríguez apuntó que la comisión investigadora, presidida por el Instituto de Aeronáutica Civil, trabaja exhaustivamente en el lugar de los hechos. Y adelantó: «Una caja negra la tenemos en nuestras manos en buen estado de conservación y la otra en las próximas horas nos llegará también.

 El Ministro de Transporte igualmente informó que para atender a los familiares en tan duro momento se han habilitado varios lugares. En el caso de La Habana, detalló, el sitio escogido fue la sede de la Corporación de la Aviación Civil de Cuba; mientras que para los familiares de otras provincias se ha habilitado el hotel Tulipán.

En ambos lugares se crearon las condiciones necesarias y un grupo médico de sicólogos y otros profesionales con experiencia en escenarios postraumáticos los acompañarán, destacó.

«Hemos coordinado con el Gobierno para que según se identifiquen los cadáveres, se les entreguen a los familiares y se les pregunte qué harán con ellos para su enterramiento o entrega de cenizas en caso que decidan incinerarlos», puntualizó.

Confirmó que a bordo del vuelo nacional DMJ 0972, un Boeing 737-200 arrendado por Cubana de Aviación, viajaban un total de 113 personas, de las cuales perdieron la vida 110. De estos, seis conformaban la tripulación, enteramente de nacionalidad mexicana. Además, se encontraban en el avión dos pasajeros de origen argentino, dos de la República Saharahui y una turista de México. El resto son cubanos. «A través de las embajadas de Cuba en los países afectados por el accidente, se han ofrecido las condolencias a las familias de las víctimas foráneas», expresó.

Por su parte, el viceministro de Salud Pública, doctor Alfredo González Lorenzo, se refirió al estado de las tres sobrevivientes, las que continúan siendo atendidas en el Hospital Calixto García. «Poseen lesiones de alta complejidad, en cuyo origen se conjugan un grupo de mecanismos complejos que tienen que ver con la alta energía de la caída de un avión, la aceleración y la desaceleración. Son lesiones no solo sobre los huesos y las articulaciones, sino también sobre las vísceras, los tejidos y las células. Ello hace que se requiera un esfuerzo extraordinario para estabilizar a estas pacientes, desde el punto de vista mecánico y hemodinámico, y poder así avanzar hacia etapas posteriores del tratamiento. Se mantienen en estado crítico y su pronóstico es reservado».