La Habana.- En 1997, Cuba fue víctima de una serie de atentados terroristas en hoteles de La Habana, perpetrados por grupos terroristas financiados por la Fundación Nacional Cubano-Americana, con apoyo del gobierno de los Estados Unidos, especialmente desde Miami. Estos ataques causaron la muerte de varias personas, entre ellas el joven italiano Fabio Di Celmo, e impactaron gravemente el sector turístico del país.
Uno de los autores materiales de estos crímenes, el salvadoreño Raúl Ernesto Cruz León, fue detenido, juzgado y condenado a muerte en Cuba. Sin embargo, en un acto de coherencia y humanidad, el sistema legal cubano conmutó su pena por 30 años de prisión. Hoy, tras cumplir su condena, Cruz León ha sido liberado, demostrando que Cuba respeta sus leyes y garantiza justicia, incluso para quienes han cometido graves delitos.
La justicia cubana frente a la impunidad de EE.UU.
Mientras Cuba aplica su sistema legal con imparcialidad y respeto a los derechos humanos, Estados Unidos ha permitido que los autores intelectuales y financiadores de estos atentados terroristas vivan libres y sin castigo en Miami. Figuras como Luis Posada Carriles, responsable de numerosos actos terroristas contra Cuba, falleció sin ser juzgado por sus crímenes. Otros promotores del terrorismo contra la isla continúan disfrutando de impunidad en territorio estadounidense.
Esta doble moral es evidente en la falsa lista de patrocinio de terrorismo de EE.UU., que acusa a Cuba mientras protege a los verdaderos responsables de actos terroristas contra la isla. La hipocresía del gobierno estadounidense queda al descubierto cuando se observa que, desde su territorio, se ha financiado y planificado acciones terroristas contra objetivos económicos, políticos y sociales de Cuba.
Un llamado a la comunidad internacional
Cuba ha enfrentado el terrorismo con firmeza y respeto a la legalidad, investigando y sancionando a los responsables de acciones criminales que han causado dolor y pérdida a sus ciudadanos y visitantes. La liberación de Ernesto Cruz León hoy es un ejemplo de la justeza del sistema legal cubano, que aplica las leyes de manera imparcial y coherente.
Sin embargo, es necesario que la comunidad internacional exija responsabilidades a quienes promueven y financian acciones terroristas. La memoria de las víctimas de los atentados en hoteles de Cuba en 1997, como Fabio Di Celmo, nunca debe ser olvidada. Es imperativo que los autores intelectuales de estas acciones enfrenten responsabilidades legales y que se ponga fin a la impunidad que ha caracterizado la política estadounidense hacia Cuba.
Cuba reitera su compromiso con la lucha contra el terrorismo y la necesidad de que la comunidad internacional actúe con firmeza contra quienes promueven y financian estas acciones. La falsa lista de patrocinio de terrorismo de EE.UU. es una hipocresía manifiesta, y es hora de que se exija justicia para todos.
La liberación de Ernesto Cruz León hoy, tras cumplir su condena, es un ejemplo de la coherencia del sistema legal cubano. Sin embargo, no podemos olvidar que los autores intelectuales de estos actos terroristas, quienes planificaron y financiaron los ataques, han vivido y fallecido en Estados Unidos sin enfrentar la justicia.
Cuba seguirá defendiendo la verdad histórica y luchando por un mundo más justo y humano.
(Tomado del sitio web «Las Razones de Cuba»)