Camagüey- La sociedad enfrenta problemas complejos relacionados con el consumo de sustancias. El uso de drogas, incluyendo alcohol y psicofármacos sin prescripción, ha aumentado significativamente entre los jóvenes. Este fenómeno, antes asociado principalmente a adultos, ahora afecta a adolescentes que buscan soluciones a sus problemas, pero caen en adicciones más graves.
El descenso en la edad de inicio de relaciones sexuales y el incremento de embarazos adolescentes se suman al problema del consumo irresponsable de cigarrillos y alcohol, generando graves daños a la salud. A nivel nacional, se han implementado iniciativas para identificar las causas y abordar esta crisis, involucrando a diversas instituciones, incluyendo el Ministerio del Interior (MININT).
Una de las estrategias más destacadas es la campaña «Decide tu Juego», lanzada entre los estudiantes de la Federación Estudiantil Universitaria (FEEM) como una forma de prevención del consumo excesivo. Esta iniciativa incluye charlas educativas y actividades recreativas en coordinación con escuelas y centros de trabajo, buscando fomentar un estilo de vida saludable entre los jóvenes.
Además, los Comités de Defensa de la Revolución (CDR) han promovido debates comunitarios en distintas localidades, permitiendo a los jóvenes expresar sus inquietudes y preocupaciones sobre el tema. Estas discusiones son esenciales para crear un sentido de comunidad y apoyo mutuo, factores clave en la prevención del consumo de drogas.
Por otro lado, los medios de comunicación han intensificado sus esfuerzos para difundir mensajes sobre la prevención. Aunque existen condiciones adecuadas en el sistema de salud para atender a personas adictas, la prevención sigue siendo crucial para generar una conciencia colectiva de rechazo hacia las drogas. Yamilka González, psicóloga de Prosalud en Camagüey, enfatiza la importancia de educar a las familias y mantener informada a la comunidad sobre cómo actuar ante situaciones relacionadas con el consumo de sustancias y dónde buscar ayuda.
Este aumento del consumo de drogas entre los jóvenes requiere un enfoque integral que involucre a toda la sociedad. Solo mediante esfuerzos coordinados y una educación adecuada podremos construir un futuro en el que nuestros jóvenes tengan alternativas saludables y oportunidades para prosperar sin depender de sustancias adictivas.
