Camagüey- La galería de arte universal Alejo Carpentier de la ciudad cabecera acogió la exposición personal «El Silbido del Silencio» del artista camagüeyano Agustín Bejarano Caballero.
La muestra es una fusión entre los pictórico y el grabado. En cada una de las obras se puede encontrar a un artista ochentero enamorado de la abstracción lírica y geométrica, la poesía, el erotismo, el paisaje y los fenómenos atmosféricos.
En «El Silbido del Silencio» se complementan en un mismo punto los ideales filosóficos de su autor: un Agustín amante del lienzo y el grabado es puesto a disposición del público para la admiración del buen arte en obras como el Harakiri.
Luego de 40 años de trayectoria artística el regreso de Bejarano a su tierra natal estuvo lleno de emociones y recuerdos hermosos, como aquel taller de grabado que fundó en su Camagüey, ese que lo abraza con orgullo y un poco de nostalgia. Un Camagüey que como siempre se queda con ansias de su regreso.
Durante la inauguración el artista anunció que la exposición será reinaugurada en diciembre de este año en la misma sede para aquellos que no pudieron asistir, y constituye una escusa perfecta para otro hermoso reencuentro con sus raíces.