El primer secretario del Comité Central (CC) del Partido Comunista de Cuba (PCC) y presidente de la República Miguel Díaz-Canel Bermúdez encabeza en esta provincia un encuentro junto al Secretariado del CCPCC sobre la continuidad en la base del 8vo. Congreso del PCC y la materialización de sus ideas, conceptos y directrices.
El miembro del Comité Central y primer secretario en Camagüey, Ariel Santana Santiesteban, presenta el programa de acciones implementadas en la provincia para dar continuidad y ejecución a los acuerdos del Congreso, según da a conocer la página de Radio Cadena Agramonte en Internet.
El funcionamiento de las estructuras del Partido desde sus organizaciones de base y la incidencia de la militancia en las principales tareas económicas y sociales centra la agenda de trabajo del Secretariado.
Santana Santiesteban refirió las acciones que ha ejecutado el Comité Provincial de esa organización a partir del Congreso, que llamó a un accionar diferente de los cuadros en el plano económico y social, en medio de la COVID-19.
Mencionó los encuentros en las comunidades con la población para buscar soluciones locales y que no dependan de recursos nacionales, los medios de comunicación en vínculos con estos perfiles de trabajo de intercambio con la población y también reseñó los encuentros con los productores en sus fincas, cooperativas y áreas productivas.
En la reunión se pone énfasis en la labor comunitaria y la participación juvenil en tareas de los Comités de Defensa de la Revolución y la Federación de Mujeres Cubanas (FMC). Desde el barrio, la cuadra y hasta el patio familiar el aporte tiene que contribuir al programa alimentario y otras tareas claves del desarrollo local, afirman los participantes.
El miembro del Buró Político y secretario de Organización y Política de Cuadros, Roberto Morales Ojeda, puntualizó la importancia de la labor de la FMC en el Programa nacional para el Adelanto de la Mujer, el enfrentamiento a la violencia de género, y del vínculo de los jóvenes y actores de la comunidad a las labores para el desarrollo.
En tanto, la gobernadora Yoseily Góngora López presentó las líneas principales del trabajo de las estructuras del Gobierno: el fortalecimiento de la gestión de desarrollo local, el Programa Soberanía Alimentaria, y el fomento del trabajo por cuenta propia y de la pequeña y mediana empresa para ampliar las producciones destinadas a población, entre otras.
El Secretariado del Comité Central indicó cumplir con la política de la vivienda, el perfeccionamiento del comercio minorista, la continuidad del mantenimiento en la red hidráulica, avanzar en el programa ganadero y la recuperación cañera, y perfeccionar el trabajo del PCC en el sector de la economía y la vida interna de la organización.
En las conclusiones del análisis, el primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, convocó a los camagüeyanos a la articulación revolucionaria para avanzar en las batallas en los planos de la economía y la ideología, y a dar continuidad a las ideas y acuerdos del 8vo. Congreso.
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REUNIÓN EN LA PROVINCIA DE CIEGO DE ÁVILA
El Primer Secretario del Comité Central del PCC denunció en Ciego de Ávila el atroz bloqueo que mantiene el gobierno de EE. UU. contra Cuba y que en medio de la pandemia se ha extendido a límites inimaginables. La persecución a las transacciones cubanas, dijo, hace más difícil la situación actual.
Analizó, además, el fuerte impacto de esa injusta política en la situación económica y se refirió al desabastecimiento que por esa causa tiene el país, lo cual ha generado inflación. También informó que se preparan medidas para enfrentar ese fenómeno.
«En Cuba no nos vamos a rendir», aseveró del dignatario cubano, en reunión con los militantes en Ciego de Ávila.
Para enfrentar esta crisis tenemos diseñada una estrategia económica, a la que le estaremos dando todo el acompañamiento político. «En el Partido —resaltó Díaz-Canel— tenemos que discutir de todos los temas, sin dogmas, sin burocracias, ni limitaciones, pero lo más importante es que aportemos soluciones en esos debates».
Sobre el trabajo del PCC persona a persona, con jóvenes, intelectuales, artistas, académicos, con el sector religioso, también con el no estatal, ofreció precisiones Rogelio Polanco Fuentes, miembro del Secretariado del Comité Central.
Por su parte, el Primer Secretario del PCC en Ciego de Ávila, Carlos Luis Garrido Pérez, informó las acciones realizadas en el territorio para concretar los acuerdos y temas debatidos en el recién celebrado 8vo. Congreso del Partido.
De Occidente a Oriente, marcha el Secretariado desde el pasado 27 de mayo, cuando comenzaron las reuniones por Pinar del Río y Artemisa, donde entre otros temas se abordó como potenciar el trabajo en las estructuras de base del Partido, la necesidad de revitalizar los métodos de las organizaciones de masas para que se parezcan cada vez más a los tiempos que vive Cuba, y el rol que corresponde al PCC en el aseguramiento político de los procesos económicos de la nación.
Que la agenda del Partido Comunista se acerque cada vez más a la agenda pública del país es uno de los mayores retos de la organización partidista, a poco más de un mes de concluido su 8vo Congreso, marcado por dos ejes: la Unidad y la Continuidad, se ha destacado también en el resto de los encuentros durante poco más de 10 días.
Igualmente se ha insistido en que no pueden haber problemas de los que afectan al pueblo, a la economía y a la sociedad, que no tengan solución; se ha debatido la manera en que los territorios materializarán las ideas, conceptos y directrices emanados del 8vo. Congreso; y se ha analizado el crecimiento al Partido de los jóvenes que militan en la UJC, proceso que debe caracterizarse por ser dinámico, creativo y que sirva de estímulo para ellos y su familia.
Asimismo, entre los objetivos a lograr a partir de estos debates, según consta en los diferentes reportes publicados de cada reunión, se encuentra procurar una vida interna del Partido fortalecida y atemperada a los momentos actuales, así como a quitar la carga de burocracia que todavía le pueda quedar a la organización, despojarla de la rutina, hacer los procesos más atractivos, con mayor impacto social, que funcionen más en el sentimiento y en las emociones del militante y de los revolucionarios, para entonces tener más vida externa, que es la capacidad de enfrentar, con la población, todos los desafíos.
