Y, SIN EMBARGO, OBAMA DICE QUE ES BUEN SOCIO DE ÁFRICA

NOTA DE LA REDACCIÓN:

Imágenes de una atmósfera cargada con gases lacrimógenos y bombas de humo ocupan las portadas de los periódicos de Estados Unidos, donde la muerte de un joven afrodescendiente por balazos de la policía desató protestas y acusaciones de racismo. La situación detonó el sábado en una localidad llamada Ferguson en el condado de San Luis, Missouri, con el fallecimiento de Michael Brown, un afrodescendiente de 18 años que, según cuentan los testigos, estaba desarmado y hasta levantó sus manos para demostrarlo

Por Ernesto Pantaleón Medina/Televisión Camagüey
Quiero comenzar este trabajo con una cita del presidente de los Estados Unidos de Norteamérica, durante la cumbre efectuada en Washington recientemente:
¨Estamos decididos a ser un socio en el éxito de África, un buen socio, un socio igualitario…¨
Nadie medianamente inteligente creería la sinceridad de las palabras del jefe de Estado yanqui, quien añadió que no guían a la primera economía del mundo y principal potencia militar, solo intereses en los recursos naturales del continente, sino también en su gente, a la cual calificó como el mayor recurso.
Pero mentiras e hipocresía aparte, lo cierto es que el afán de Washington es la entrada de sus empresas insignia, como Coca Cola y General Electric, al jugoso bocado que ofrecen las naciones africanas, además de reforzar sus posiciones militares en el área, para ¨responder a conflictos y amenazas terroristas…¨
Con tal pretexto, el gendarme internacional mantiene en la zona miles de soldados y cuantiosos medios de combate, entre ellos la llamada Fuerza de Operaciones Especiales
En países africanos el Pentágono mantiene una base expedicionaria de la Marina de Guerra y un aeródromo  considerado el mayor del continente, que sirve de centro para diferentes operaciones, entre ellas muchas con los conocidos y terribles ¨drones¨ no tripulados, de negra historia en el asesinato de civiles  como ¨bajas o daños colaterales¨.
Ante situaciones como la descrita, asombraría que algunos gobiernos creyesen las falacias del mandatario estadounidense, cuyas decisiones en el terreno militar ya se sabe, han costado un alto precio a países como Libia, Siria, Irak, Afganistán y otros, sin contar el desmedido e irracional apoyo al holocausto palestino a manos de Israel.
Nada, como reza una antigua sentencia popular: ¨que lo compre quien no lo conozca¨