“El mundo hoy es un caos, y seguimos abogando porque no sea demasiado tarde”. Esa sentencia del líder histórico de la Revolución Cubana, fue recordada por nuestro Presidente, el General de Ejército Raúl Castro, en el segmento de Alto Nivel del 70 Período de Sesiones de la Asamblea General de la ONU.
Así Cuba está de nuevo, ahora desde el organismo mundial, ofreciéndole enseñanzas a este mundo de hoy matizado por la política de guerra y violencia, y desigualdad y las crisis con su mayor exponente en las recientes oleadas de inmigrantes desde el Medio Oriente y el norte de África hacia Europa.
Tres intervenciones realizó Raúl en Naciones Unidas, en esta su primera visita como Jefe de Estado a Nueva York, la Agenda de Desarrollo Sostenible, el de la lucha por la igualdad y el empoderamiento de la mujer, y a la celebración por los 70 años de la Asamblea General de la ONU. Tres momentos que lo señalan como el defensor de Cuba en sus más grandes batallas en la arena mundial.
Y con Raúl en la ONU dimos fórmulas, porque condenamos la cantidad de dinero empleado en la carrera armamentista que bien podría ser usado para evitar los altos niveles de hambre y analfabetismo. Con la CELAC y la Proclama de Zona de Paz de las naciones de América Latina y el Caribe, se confirman que en las regiones antagónicas en sus concepciones, se puede conseguir la coexistencia pacífica y avanzar en un diálogo de paz sin la intromisión en los asuntos de los Estados y lograr una convivencia equilibrada.
Esas denuncias están a tono con la posición del Gobierno Cubano cuando desmintió y refutó categóricamente las informaciones irresponsables e infundadas sobre la supuesta presencia de tropas de nuestra nación en la República Árabe Siria.
El Instituto de Estudios Cubanos y Cubanoamericanos de la Universidad de Miami divulgó un informe no confirmado de una fuente no especificada, indicando que se habían detectado tropas cubanas en Siria en respaldo a Assad y a la intervención de Rusia en ese país.
La cadena estadounidense de noticias FOX News se hizo eco del informe del instituto, citando a un funcionario estadounidense no identificado que «confirmó» el informe. La historia circuló posteriormente en las redes sociales.
La Casa Blanca tuvo que reconocer que no había visto evidencia que indicara que los informes eran verdaderos.
Maniobras como esa hicieron que Raúl en la ONU reafirmara nuevamente la posición de Cuba de paz, amistad, igualdad, solidaridad y justicia.
