Estados Unidos: ¿Filantropía y bombas o prepotencia y abuso?

La pata peluda del lobo enmascarado de oveja asoma a cada momento; por ejemplo, la falsa lucha contra los terroristas en Siria y los pretextos a cual más increíble de proteger las minorías deja cubierto a medias el plan de Trump y sus secuaces  para derribar al gobierno de  Bashar Al Asad, un mandatario que goza del apoyo mayoritario de la población y que, con la ayuda de Rusia ha  logrado triunfos importantes contra las fuerzas del Estado Islámico.

Y esgrimen los “paladines de la libertad”  la salvaguarda de la democracia en el mundo, mientras se entrometen en los asuntos internos de cualquier país, sin importar cuán estable sea su sociedad, siempre y cuando represente una ventaja en el mapa geoestratégico del orbe, o posea recursos que interesen a las transnacionales que dominan en la potencia del norte.

Mientras tanto, las incursiones aéreas y el despliegue de tropas continúan, ya sea con el empleo de soldados profesionales o la contratación de mercenarios, tanto en África como en el Oriente Medio.

Thomas Waldhauser, jefe del Comando África (Africom), afirmó por ejemplo, que Somalia es importante para “promover los intereses estadounidenses en la región” (*)

Como reza una vieja sentencia de mi pueblo, “Verde con puntas…Guanábana”, para ejemplificar lo obvio, como lo señalado en el párrafo precedente, unos intereses que todo el mundo sabe qué representan para el país agresor en cuanto al posible uso de la fuerza en el área como desgracias, muerte y sometimiento para los pueblos  bajo la bota extranjera.

Basta  señalar que desde el comienzo de la “era Trump” los ataques con bombas y misiles sobre supuestas bases del DAESH  se han triplicado en relación con el periodo de Obama, sin lograr resultados positivos, al memos en favor de la paz y la estabilidad en un continente que más que las balas necesita agua, comida y medicinas.

Las incursiones de drones y soldados yanquis han servido de muy poco, como señalara a The Intercept William Hartung, director del Proyecto de Armas y Seguridad en el Centro de Política Internacional: ” El enfoque demasiado militarizado del |Pentágono  para el problema ha sido un fracaso absoluto”(*)

De ninguna manera  crea usted cuentos de camino, porque los prepotentes que portan fusiles  no buscan que la mítica paloma blanca con el ramo de olivo en el pico se pose sobre su hombro, sino  conquistar más territorio, más recursos y acumular más dinero y poder.

Así está una buena parte del mundo durante la presidencia de Donald Trump, el de las grandes “ocurrencias”, el mismo que quiere construir un muro de segregación y  xenofobia, el que quiere comprar Groenlandia como se adquiere un dulce en una pastelería.

(*) Juventud Rebelde, 18 de agosto de 20019.