De acuerdo con la información de la periodista Gleibis Gómez «a partir de este miércoles cerrarán al público las 49 tiendas que expenden productos en Moneda Libremente Convertible, medida excepcional que se aplica por la alta concentración de personas en esas unidades comerciales y que estará vigente hasta tanto mejore la situación epidemiológica» (…) Se mantendrá la prestación de servicios en tiendas virtuales».
Es cierto que, o tomamos medidas drásticas, o el virus nos come a todos. Pero lo de las tiendas en MLC es un mal que desde que inició la COVID-19 no se corta de raíz. Si realmente se terminara con los coleros (80% de quienes acuden a esas tiendas y cuya «gestión y esfuerzo» luego vemos en Revolico y en las aceras sin que pase NADA), no hubiese tanta aglomeración en esos establecimientos.
Las tiendas en MLC, en muchísimos lugares, han sido una puerta abierta y, al parecer, sin cerradura por donde se han colado impunemente los coleros, los acaparadores y los revendedores, astillas todos del mismo palo.(http://www.cubadebate.cu/especiales/2021/07/03/tiendas-en-mlc-entre-acaparadores-coleros-y-reventas-video/)
Son caros, es verdad, pero es donde hay. Aquí la lucha es contra quienes tienen todo el tiempo del mundo para hacer colas, porque saben que siempre habrá quienes acudan a sus ofertas, porque nos les (nos) queda más remedio.
(Caricatura de Martirena, tomada de granma.cu)
