Así trascurre el voto por Cuba

El domingo amaneció muy animado en las ciudades, poblados y zonas rurales de la provincia de Camagüey. En los consultorios de la familia no hay padecimientos, más bien una saludable presencia de pobladores daban sus votos por Cuba;  las escuelas abrieron sus puertas a familiares de los alumnos y vecinos para impartir una clase de democracia. Muchas instituciones y viviendas cedieron espacios a  mil 766 colegios electorales en los que se eligen a delegados a la asamblea provincial del Poder Popular y a los diputados al Parlamento cubano.

¿Quién puede cuestionar que sean niños y adolescentes quienes custodian las urnas electorales? Es un día muy esperado por ellos, como una clase de historia en la que se decide el futuro de la Patria. Sienten muy de cerca el halago de los vecinos del barrio o la comunidad, quienes le regalan el premio de una sonrisa, tras recibir del dueto de pioneros el ¡Voto!

Esas son unas de las cosas que distinguen al proceso electoral, participativo, y lo hace único en el mundo.

Desde las siete de la mañana –precisamente en la fecha del  cambio para la hora de verano– abrieron sus puertas los colegios electores en toda la llanura camagüeyana. De esta forma acudieron los mineños de todas las edades, que hacen una pausa en el restablecimiento de los daños causados por huracán Irma para el pleno ejercicio de democracia.

En el sur, el municipio de Vertientes, eminentemente agrícola, mas de 37 mil 377 votantes posee el derecho para elegir entre los candidatos propuestos a quienes consideran más aptos, y con los meritos suficientes para representarlos en el Gobierno provincial y desde un curul  del Parlamento.

Tales imágenes de democracia popular se reiteran en el resto de los municipios para reafirmar la continuidad de la Revolución..

Según datos de la Comisión Electoral Provincial (CEP), cerca del mediodía de este soleado domingo habían ejercido el voto secreto y directo por delegados y diputados aproximadamente más de la mitad de los electores camagüeyanos.