Como la canción popular comenzó el quinto mes del año en la mayor de las provincias cubanas. Los residentes en zonas urbanas y rurales de la llanura camagüeyana miraron al cielo este jueves, unos para dar la bienvenida a los aguaceros que llegaron en la madrugada, –una expectativa frente a los antojos climáticos de “El Niño”–, mientras otros calculaban la manera de escabullirse de las lluvias en el diario acontecer.
Aun cuando exista la tradición de empaparse en el primer aguacero, un grupo de hombres y mujeres estuvo preocupado por los riesgos y, sobre todo, muy ocupado por las torrenciales lluvias. En Camagüey, la capital de la provincia, fueron necesarias medidas especiales en el río Hatibonico, que durante estos eventos meteorológicos se convierte en émulo amazónico.
VIDEO: Atentos a posibilidades de lluvias intensas sobre Camagüey
El colega Pedro Paneque publicó en Facebook que fue necesario “retirar parte de un vial de facilidad temporal, del proyecto La ciudad mira a sus ríos, lo que propicio un inmediato descenso del cauce, y evitó el desbordamiento y sus posibles daños colaterales”.
En la red social, el veterano periodista añadió que en la quinta jornada de mayo, las precipitaciones habían sido fuertes también en los municipios de economía agropecuaria de Vertientes, Guáimaro y Santa Cruz del Sur.
Por su parte, el director de la Empresa de Aprovechamiento Hidráulico en Camagüey, Gustavo Riesco López, aseguró al diario ADELANTE que sin excepción, todas las presas vinculadas a la producción arrocera aumentaron ostensiblemente la recepción de agua, encabezada por el importante embalse de agua Jimaguayú.
Sin dudas, puede considerarse este acontecimiento de la vida real como créditos para las prácticas del ejercicio Meteoro, convocado por la Defensa Civil cubana para los próximos días 14 y 15, antes del inicio de la temporada ciclónica, desde junio hasta noviembre.
Si comencé con la letra de una canción cierro el comentario con un refrán popular Mayo reglado, ni muy seco ni muy mojado pues sigo esperanzado –como la mayoría de mis coterráneos– los pronósticos de especialistas del clima en torno a la actual retirada del evento El Niño/Oscilación del Sur (ENOS), que nos sometió a los meses más cálidos en 64 años. La normalidad retornará a mediados del presente 2016.
