En la provincia de Camagüey además de promover el empleo de la tracción animal en la roturación de tierras y otras labores agrícolas, se diversifican en áreas rurales las producciones de ladrillos de barro y la prestación de variados servicios, según apreció un equipo de la televisión territorial en los municipios de Jimaguayú y Florida.
El empleo de alrededor de tres mil cuatrocientas yuntas de bueyes retorna a los campos para enfrentar las actuales limitaciones energéticas y no detener la siembra o perder las cosechas.