El Che Guevara economista

El «Che»en el Ministerio de Industrias

No hay un prisma de la Revolución en el que no esté presente la huella de sueños y realidades del argentino Ernesto Guevara de la Serna, que consagró su vida al lado del pueblo de Cuba.

Si complejas fueron las condiciones de la lucha armada, desde que formó parte de la expedición del yate Granma en diciembre de 1956, la consolidación de una nueva sociedad cubana también requirió de su osadía y pensamiento.

El primer guerrillero ascendido al grado Comandante en la Sierra Maestra, tras el triunfo de la Revolución el primero de enero de 1959, asumió responsabilidades militares en la organización del Ejército Rebelde y también formó parte del grupo de líderes que encabezó Fidel en la forja del nuevo proyecto de sociedad en macha en espiral ascendente con el consenso de todos y para el bien de todos.

Los acontecimientos sucedían con rapidez en el cumplimiento del Programa del Moncada, como la Reforma Agraria decretada a cuatro meses de la victoria contra el tirano Batista, y posteriormente la nacionalización de la banca, de la industria y del comercio…En fin, se conformaba una nueva estructura económica y de reformas sociales.

La sociedad cubana tras medio siglo de cambios, logros y reveses

Quienes conocieron y los que estudian su obra clasifican al “Che” como comandante guerrillero enemigo mortal del capitalismo, marxista alejado de dogmas, periodista, pensador, embajador, ministro…y, también, como economista.

Para esta última condición se destacó por el estudio, durante años, de los temas relacionados con la economía socialista y capitalista, además de convencer y preparar a numerosos colaboradores y allegados. El Che decía que sin conocer el libro “El Capital” no se puede ser un economista en todo el sentido de la palabra.

http://www.trabajadores.cu/20130614/che-economista-impresionante/

A finales del 1959 y durante un poco más de un año, en pleno desarrollo de su pensamiento economista fue presidente del Banco Nacional de Cuba para controlar las operaciones con las divisas del pueblo. Por supuesto que hubo una reacción de personajillos, incluso del embajador de los Estados Unidos en Cuba.

Fidel expresaba por aquellos días: «para que nadie se llame a engaño; el Che no está ahí para hacer ninguna barbaridad, el Che está ahí igual que cuando lo mandamos a Las Villas a impedir que pasaran los tropas enemigas hacia Oriente; lo he mandado al Banco Nacional a impedir que se vayan las divisas y para que el parque que tenemos en divisas pues se invierta correctamente».

Posteriormente se ve al comandante guerrillero en nueva trinchera de la economía en el Ministerio de Industria. El doctor en ciencias Joaquín Infante, quien laboró junto al ministro ha destacado: “El Che hablaba de economía de manera impresionante”. “Guevara era un abanderado de la planificación, del control interno, de la contabilidad, el costo unitario y las auditorías”, recordó además el especialista, galardonado con el Premio Nacional de Economía – 2000.

Por estos días, y con nuevas generaciones de hombres y mujeres al frente de las múltiples tareas de la Revolución, el pensamiento dialéctico de Ernesto Guevara adquiere actualidad, cuando los cubanos estamos enfrascados en la urgencia de cambios estratégicos, para hacer sustentable e irreversible la economía socialista en Cuba.

Así las cosas, resulta referencial el sistema de formación de cuadros que introdujo, cuando era ministro de Industria y que hoy se aprecia en los múltiples y variados cursos que se imparten a los dirigentes.

Además, constituyen fuentes de actualización los artículos escritos sobre problemas como los Costos y Precios, la actitud ante el trabajo, los intereses económicos y los estímulos, Métodos de Dirección y Control de la Economía, y la planificación socialista.

Para reanimar las bases teóricas del pensamiento económico de Ernesto “Che” Guevara, tenemos la ventaja de que el Partido único y el Gobierno Revolucionario tienen la voluntad política de suprimir, creativa y originalmente, las deformaciones que alteran la eficiencia empresarial y refrendaron el camino para, como afirma el presidente Raúl Castro “…hacer triunfar el programa económico y social del que nos hemos dotado”.